Su obra más importante es “Anales de la Inquisición desde que fue institutído aquel Tribunal hasta su total extinción en el año 1834: obra escrita con presencia de datos auténticos procedentes del Archivo de aquel Tribunal” (Madrid: Gregorio Hernando, 1868). Al lado de esta labor historiográfica, desarrolló otra como pedagogo y traductor, en la que destaca, junto a la traducción del Giannetto de Parravicini, otras realizadas del francés: “El padre nuestro de Fenelon” (Madrid 1848), “Pequeña moral en accion” de E.L. Fremont (Madrid, s.a.). Compuso a su vez unas “Lecciones elementales de religión y moral” para uso de los niños (Madrid, 1872).