Datos del documento
- Original, título
- Le mie prigioni: memorie di Silvio Pellico
- Original, fechas
- 1ª edición: ed. prícipe: Le mie prigioni: memorie / di Silvio Pellico da Saluzzo (Torino, Giuseppe Bocca, 1832); ed. anotada: Le mie prigioni: memorie / di Silvio Pellico ; colle addizioni di Piero Maroncelli, Lugano: Tip. di G. Ruggia e C., 1833; ed.con apéndice: Le mie prigioni ; aggiuntovi: La morte del prigioniero nel carcere di Spielberg / S. Pellico, Capolago: Tipografia e Libreria elvetica, 1833; ed. conjunta con “Dei Doveri dell’uomo”: Le mie prigioni: memorie ; Dei doveri degli uomini ; Discorso ad un giovane / di Silvio Pellico, da Saluzzo, Parigi ; Lione, 1834.
- Lugar de publicación
- Madrid
- Editor/Impresor
- Calpe (editor)
- Fechas
- 1922 [edición]
- Edicion
- 1ª ed.
- ISBD
- Mis prisiones / Silvio Pellico ; la traducción del italiano ha sido hecha por Ciro Bayo. — Madrid : Calpe, 1922 (Talleres y Editorial Calpe). — 271 p. ; 15 cm. — (Colección Universal ; 733-735)
- Verificada
- ❌
- Ejemplares
-
- BC: 2001-8-25880 (Sello: "Biblioteca Popular, Vilafranca")
- BNM: 7/72938
- BPEBurgos
- BPECoruña
- BPEGirona
- BPEMurcia
- BPEOviedo
- BPESoria
- BPEVitoria
- BPEZaragoza
- RE: MP 32656, MP 32483
- Observaciones
La editorial Calpe reeditó esta versión en Buenos Aires en 1945, y otras reediciones se han ido sucediendo hasta 1962, ya en la colección “Austral”
Traductor
Bayo y Segurola, Ciro 1859 - 1939
Nació en Madrid y cursó estudios en Barcelona, donde se licenció en Derecho en 1885, después de haber transcurrido un período de tiempo en la cárcel de Mahón durante la guerra carlista. Ha sido definido como un escritor de vida errante y estrafalaria, con un depósito inagotable da buenas y variadas lecturas. Apenas concluidos sus estudios de derecho, emprendió viajes por Europa y América del Sur (Argentina, Bolivia), donde permaneció diez años (1890-1900) recogiendo elementos que inspirarían muchos libros suyos, además de fundar un Colegio Infantil de Varones en la Pampa. De sus viajes a pie por España nacieron “El peregrino entretenido” (1910) y “Lazarillo español” (1911). De su estancia en tierras americanas quedan unas sabrosas “Amenidades parlamentarias”, "María López", "En la selva virgen", "Los Aroanas", “Romancerillo del Plata”, “Vocabulario criollo”. De algunos esporádicos estudios de medicina, surgieron manuales curiosos como 'Higiene del verano y de los veraneantes', 'Higiene sexual del casado', 'Higiene sexual del soltero'. Recibió el premio en el Centenario de Calderón por un estudios sobre “La vida es sueño” y fue una reconocida autoridad en lexicografía del lenguaje criollo. Tuvo relación con Baroja y Unamunocon quien mantuvo una interesante correspondencia (cfr. José Antonio Ereño Altuna, “Cartas de Ciro Bayo a Unamuno. Un diálogo difícil”, Bilbao, Ikur, 1996) y dejó huella en Camilo José Cela. Tradujo, entre otros, a Flaubert, Kipling, Leopardi, Pellico, Salgari, Pschkin, Vallés.